jueves, diciembre 27, 2007

No habrá una sóla palabra

No habrá una sóla palabra
que borre el sortilegio
en que envolvió tu nombre
a mi alma, mi norte,
no habrá veranos nocturnos,
ni tardes de otoño,
ni rocíos de primavera
que destierren de mí
tu mañana fresca de invierno.

¡Cómo extraño
volver a pronunciarte!
Un fatal mutismo indeleble
envuelve mi entorno por completo,
sólo doy vueltas
en un circo que
no tiene chiste,
sin gracia...

Extraño tu sonrisa de niña
iluminando tus ojos
y mi cielo,
extraño tu halo lánguido
alimentado por tus propias raíces,
extraño tu fuerza
compartida con la mía,
nuestras soluciones
mutuas y tan ajenas...
nuestras ilusiones
cercanas y tan lejanas...
ahora tan lejanas...

No hay comentarios: